Ayer no tuve la sensación de estar ya en el camino por varias circunstancias, la etapa ya la había hecho dos veces y después porque me he alojado en casa de mis primos, Carmen y Juancho, que es como decir en mi propia casa, me parecía que había hecho una salida como un sábado cualquiera con los "rutas tranquilas" sólo que con menos gente. Por cierto he desayunado como en el pueblo Cola Cao en tazón y bizcochos y su zumo de naranja, mejor que los reyes.
Hoy ya es otra cosa, hay flechas amarillas por todos los lados, y vemos constantes alusiones al camino por todos los lados. Los caminos aunque blandos no tienen ese barro que hace entorpecer la marcha y son totalmente ciclables.
El campo está precioso y luce toda la gama de verdes, desde el más oscuro de los pinares hasta el más claro de la hierba, rapaces por todos los lados, perdices, el agua brota por todos los lados.
Los pueblos se van sucediendo, Zamarramala ¡¡¡qué vistas de Segovia!!!, Valseca, Los Huertos, Añe, donde hemos vuelto a encontrarnos con un paisano que conocíamos Tomás y yo y con el que hemos charlado un ratillo, Pinilla Ambroz donde había un vecino locuaz y con ganas de hacernos ir por otro sitio, en Sta, Mª la Real de Nieva, hemos coincidido con otro bicigrino y se nos ha agregado al grupo.
He aprovechado que hemos parado a comer en Nava de la Asunción enfrente de un centro cultural para hacer esta crónica que intentaré terminar cuando acabemos la etapa si es posible. Anuncia, la mujer de mi amigo Tomás y quinta mía, nos ha preparado unos bocatas de muerte. Los datos técnicos y esas cosas cuando acabemos la etapa
Hoy ya es otra cosa, hay flechas amarillas por todos los lados, y vemos constantes alusiones al camino por todos los lados. Los caminos aunque blandos no tienen ese barro que hace entorpecer la marcha y son totalmente ciclables.
El campo está precioso y luce toda la gama de verdes, desde el más oscuro de los pinares hasta el más claro de la hierba, rapaces por todos los lados, perdices, el agua brota por todos los lados.
Los pueblos se van sucediendo, Zamarramala ¡¡¡qué vistas de Segovia!!!, Valseca, Los Huertos, Añe, donde hemos vuelto a encontrarnos con un paisano que conocíamos Tomás y yo y con el que hemos charlado un ratillo, Pinilla Ambroz donde había un vecino locuaz y con ganas de hacernos ir por otro sitio, en Sta, Mª la Real de Nieva, hemos coincidido con otro bicigrino y se nos ha agregado al grupo.
He aprovechado que hemos parado a comer en Nava de la Asunción enfrente de un centro cultural para hacer esta crónica que intentaré terminar cuando acabemos la etapa si es posible. Anuncia, la mujer de mi amigo Tomás y quinta mía, nos ha preparado unos bocatas de muerte. Los datos técnicos y esas cosas cuando acabemos la etapa
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