domingo, 1 de junio de 2008

A MODO DE BALANCE



Una vez pasado cierto tiempo y que las emociones han reposado es el momento de hacer balance. He disfrutado, he sufrido, me he emocionado, me he cabreado pero el saldo no puede ser más positivo, el único pero que le puedo poner a esta "aventura" es que en determinados momentos he tenido la sensación de ir demasiado rápido.

Me quedo con los momentos mágicos: la salida desde Cercedilla, el trato recibido en Villeguillo, el paisaje de cuento antes de entrar en Ciguñuela, el mecánico del taller "Manivela" de Serrada que nos ofreció toda su ayuda, el camino del canal de Castilla, el vino de las hospitaleras de Bercianos, la charla con Telesforo en el albergue de Puente Villarente, la atención de Isabel en Rabanal, el ambiente especial el albergue Pequeño Potala de Ruitelán, el encuentro con el peregrino alemán en el km 100 y por encima de todo la entrada al Obradoiro.

Gracias especiales a Tomás, José Javier y Felipe, inmejorables compañeros del camino.
Muchas gracias a todos los que me habéis mandado mucha fuerza con vuestros mensajes en este blog.

Empieza ahora mismo el camino del año que viene.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Enhorabuena!!!

Me alegro de que el balance haya sido positivo. He seguido tu blog en todos estos días y me he sentido identificado con muchas de las cosas que has puesto.

Una aventura increible!!!

Estoy deseando que llegue mi turno allá por septiembre.

Un abrazo Bready!!!

Fzarcero (Fernando) dijo...

Mi mas sincera enhorabuena Jose Luis... estos momentos son los que no se olvidan nunca.

Ahora es el momento de comenzar a preparar el camino para el año que viene, esto es como las fallas que no han terminado y ya se piensa en las siguientes...

un saludo

Unknown dijo...

Gracias Jose Luis por haber sabido compartir tus vivencias con nosotros.

No he podido evitar echarme unas risas al leer tus comentarios, ya que tengo la suerte de conocerte personalmente y saber el tono de humor que siempre pones a tus comentarios.

Enhorabuena por tu camino y el de Tomás y muchas gracias de nuevo por habernos acompañado por tierras segovianas.

Un abrazo.